Intervenir en el mundo, una actitud ética

Rafael Selas: Hice una Ingeniería técnica de Imagen y Sonido, que luego ha tenido poco que ver con mi carrera profesional, pero bueno. la ver- dad es que me fui a hacerla a Estados unidos y estuve becado allí, en una Escuela de arte, y estuve durante unos años luego trabajando allí. María García-Alix: Trabajabas en Miami como productor musical. Rafael Selas: Sí, estuve trabajando mucho con Carlos Marmo, que es un productor de música para televisión sobre todo, y luego ya cambié a trabajar con Sky y con televisa Internacional. Fueron unos años de mu- cho ajetreo, de mucho trabajo, en producción se trabaja una barbaridad, pero no más de lo que trabajamos ahora con los niños. María García-Alix: ¿Cómo fue la primera vez que llegaste a Lamu, en Ke- nia? ¿Cuándo decidiste quedarte allí? Rafael Selas: Cuando estábamos produciendo hicimos un viaje a república dominicana después de un huracán muy fuerte. Ya me cambió el chip en aquel viaje, y desde entonces estuve dándole vueltas a cómo poder fundar una institución de ayuda a la infancia, porque me encontré una situación muy difícil allí. luego la casualidad me llevó hasta lamu, hasta África, a encontrar una sociedad con ninguna onG, con muchísimas ne- cesidades, en medio del cuerno de África, con hambrunas, con una si- tuación infantil terrible, y la verdad es que me decidí poco a poco, no fue una decisión muy radical. Empecé ayudando y luego poco a poco me lié la manta a la cabeza y decidí abrir mi propia institución. María García-Alix: Uno de cada tres pobres en el mundo sigue siendo africano y los niveles de desnutrición por ejemplo a día de hoy alcan- zan el récord de 223 millones de seres humanos. ¿Hay esperanza para Kenia? Rafael Selas: Pues es complicado, porque con el cambio climático han cam- biado mucho las reglas del juego. antes eran sociedades de subsisten- cia que vivían a través de la agricultura, de la pesca, y tenían un nivel de

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